jueves, 20 de octubre de 2016

miércoles, 19 de octubre de 2016

JARRONES ANTROPOMÓRFICOS MANGBETU

Los exploradores del siglo XIX, que describen con tantos detalles las obras de arte del palacio y señalan la existencia de una cerámica de calidad, no mencionan en absoluto la alfarería antropomórfica. ¿Esta mdoa de jarrones con rostro humano, tan raro en África, sería el fruto de una invención reciente estimulada por alguna influencia europea? Parece muy difícil creerlo.
Los jarrones son redondeados, acabados en una cabeza y un asa que une la nuca con la parte de atrás del cuerpo abombado. Las cabezas son tratadas minuciosamente, el cráneo alargado, los ojos rasgados, la frente y las mejillas marcadas por líneas de puntos y escarificaciones. El cuello suele estar decorado con un collar que a veces lleva pequeños colmillos. Sobre la panza del vaso aparecen a veces unos brazos minúsculos poco salientes, pequeños pechos o hasta un relieve que representa un niño.
Las cabezas son alargadas a semejanza de los cráneos de los mangbetu, como resultado de la presión que las madres realizan en sus hijos desde la infancia conc uerdas de rafia.
El paisaje, siempre  presente, está realizado con filas de puntos y líneas. Para ciertos vasos, el alfarero se inspira en dibujos geométricos. Generalmente, estos vasos se utilizaban para conservar el vino de palma destinados a los jóvenes iniciados.

Otros recipientes mangbetu con figura humana son las cajas de corteza. Son bastantes grandes y de forma cilíndrica. La base y la tapa, de madera maciza, reciben toda la atención del artesano. La base es circular y lleva un estrechamiento en forma de nudo esculpido. Puede tener pies o aparecer todo el cuerpo humano. La tapa está decorada con las cabezas alargadas. Estos recipientes se utilizaban para almacenar miel. Algunos etnólogos e historiadores ven el origen de estos recipientes en los vasos canopes del antiguo Egipto.

PREVENIR ES CURAR


martes, 18 de octubre de 2016

sábado, 15 de octubre de 2016

viernes, 7 de octubre de 2016

TELAS KORHOGO

La tela Korhogo procede del pueblo senufo en la región de Korhogo, Costa de Marfil. Entre sus actividades económicas destaca la realización de diversas artesanía, entre ellas la manufactura de telas de algodón. Tradicionalmente con estas telas se hacían trajes ceremoniales, que se utilizaban en los ritos de iniciación del Poro, institución que actúa como cauce de toda la actividad política, social, económica y religiosa de los diferentes grupos senufo.
Después de la cosecha del algodón, las mujeres más ancinas del pueblo suelen limpiar e hilar el algodón a mano. Para la producción de los tejidos intervienen dos tipos de artesanos. Primero los tejedores, que tejen los hilos en tiras de cuatro pulgadas de ancho, utilizando telares de mano. Cuando tienen varias tiras las cosen juntas para hacer un lienzo. Luego actúan los pirograbadores, que aplican un tinte de lodo. Este tinte lo preparan solo las mujeres, mientras que los artesanos siempre son los hombres.
A través de estas telas se puede contemplar la vida tradicional de los senufo, sus creencias y ritos. Estos paños fueron originalmente utilizados como protección y comunicación con el mundo sobrenatural. A menudo, después de una consulta a un sacerdote tradicional, un paño con cierta simbología sería seleccionado a fin de facilitar la solución de un problema particual. Los cazadores lo llevaban como camuflaje, para expresar prestigio o para tener buena suerte.
Los animales mitológicos tienen especial importancia por su significado, como la serpiente, el camaleón, la tortuga, el cocodrilo y el cálao, pues según la mitología fueron los cinco primeros seres de la creación.




SIGNIFICADO DE LOS GRABADOS
La cabra representa la destreza masculina. El cocodrilo, la fertilidad de los hombres, La pintada, la belleza interior. El pescado la vitalidad y la abundancia. El león representa la realeza. El cazador, los misterios de la vida. El pollo, la fertilidad y la gracia. El árbol, la sombra de la sociedad. Los huesos de pescado, la desnudez. El pájaro, la libertad. La serpiente, la abundancia en la tierra.